sábado, 12 de marzo de 2011

Dad?

Me duele.
Me duele que nos mientas, que no nos llames, que no quedes con nosotras, que ni siquiera te preocupes por nuestra salud.
Me jode irremediablemente que nuestras conversaciones no duren más de cinco minutos. Que llevemos casi dos meses sin pisar tu casa, que nos hayas dejado aquí, como si no te importásemos una mierda.
Me hace daño que me hagas llorar por que te echo de menos. Por que quiero a mi padre, lo quiero y lo necesito. No solo quiero que me pregunte que si estoy estudiando, no quiero que cuando le diga que he estado mala y no me he podido presentar a un examen me diga que entonces cuando lo voy a hacer y ni siquiera me pregunta si estoy mejor.
NOquiero que mamá tenga razón con respecto a todo lo que dice sobre ti. Odio que nos hayas abandonado de una manera tan fuerte y tan directa. Que después nos llames solo para decirnos que estás malo, que te duele algo o lo que sea; que después cuando te vas de casa te vayas con mala cara por que mi hermana pasa de tu culo.
Realmente, que es lo que esperas? que te recibamos con los brazos abiertos después de dos meses de desaparición? Eso lo puedes esperar de mi, por que soy gilipollas.
No pienso poner más de mi parte, por que ya no sé si te lo mereces. No me importa que rehagas tu vida, que estés con tu nueva novia casi todos los días, pero dedícanos algo de atención. Nosotras somos tu puta familia, no ella.
Odio no poder estudiar bien por que nos has llamado solo dos minutos.
Yo no me lo merezco, joder. Siempre he estado con buena cara delante de ti, nunca he dicho todo lo que pienso por, simplemente, no hacerte daño. ¿Y así es como me lo agradeces?
Yéndote de casa hace 6 años, tras habernos puesto a nosotras tres patas arriba, preocupándonos por ti cuando no llegabas por las noches, haciéndonos llorar cuando llegabas a casa borracho, e insultando a mi madre. Y ahora esto.

Ya no sé ni siquiera si merece la pena llorar por esto. Estoy harta de ti. De tener un padre que se porte así conmigo, estoy hasta los cojones.
Estoy arrepentida de haberle hablado tan bien de ti a Juanjo, y es él el que me anima a llamarte. Por que a mi ya me da igual llamarte o no.


¿Y sabes lo peor? Que yo una vez quise ser como tú.

No hay comentarios:

Publicar un comentario